¿Qué es la Psicomotricidad?
La psicomotricidad es la acción del sistema nervioso central que crea una conciencia en el ser humano sobre los movimientos que realiza a través de los patrones motores, como la velocidad, el espacio y el tiempo.
Constituye un enfoque global de la educación mediante la cual se procura desarrollar al máximo los potenciales psíquicos , intelectuales y motores del niño, respetando las leyes que rigen su evolución y la inherente relación entre unos y otros.
El yo corporal
El YO corporal es «el conjunto de reacciones y acciones del sujeto que tiene por misión el ajuste y adaptación al mundo exterior,(Vayer 1977) las cuales permitirán al niño ir elaborando una imagen mental de su propio cuerpo, su esquema corporal,
La conciencia del propio cuerpo, es fundamental para un desarrollo físico y psicológico normal. Sin ella, el niño/a no puede comprender que es un ser independiente, separado del mundo que lo rodea, que es un YO.
La representación mental que el niño/a tiene de su propio cuerpo, de sus posibilidades y limitaciones para manejarse en el mundo circundante se llama esquema corporal. Este se formará no sólo gracias a las experiencias que tienen en niño/a en su entorno sino gracias a la mielinización progresiva de las fibras nerviosas, regidas por dos leyes psicofisiológicas válidas, antes y después del nacimiento.
Estas leyes son dos: la céfalo caudal y la próximo distal. En la primera, el desarrollo se extiende a través del cuerpo desde la cabeza hasta las extremidades y en la segunda, el desarrollo procede desde el centro hacia la periferia a partir del eje central del cuerpo.
Además de la representación mental, desarrollamos la imagen corporal, esto es cómo percibo mi cuerpo, cómo lo siento.
La imagen corporal está influida por las características físicas, lo que siente acerca de sí mismo, la percepción que los otros tienen de mi cuerpo, los estados de ánimo, humores y actitudes.
Finalmente, hablamos de concepto corporal para referirnos al conocimiento fáctico del cuerpo: es decir, ser capaz de reconocer, identificar y nombrar las partes de su cuerpo. Primero hay un conocimiento no verbal y luego verbal. Un niño que dibuja una figura humana con cuatro piernas , manifiesta no tener el concepto corporal adecuado. El concepto se desarrolla brindándole información sobre su cuerpo, las partes, órganos, funciones.
Ritmo y percusión
Al ver un grupo de niños junto a un profesor escuchando música puede emocionarnos, sorprendernos o alegrarnos. Esa clase divertida y ordenada que ha logrado el profesor, nos llama a reflexionar ¿Para qué sirve una clase como esta?
La disposición de los niños en círculo obliga a que todos se puedan ver . Las sillas pegadas unas a otras obliga a los niños a sentarse correctamente favoreciendo en control postural del cuerpo manteniendo erguida la columna.
El profesor ejecuta el movimiento y el niño mira, presta atención y reproduce el movimiento por imitación.
A través de la música el niño incorpora el ritmo, la cadencia, la secuencia de movimientos. El cuerpo siente el ritmo y se deja llevar con la coordinación de movimientos que exige la canción. La diferencia de ritmo o de frecuencia de los golpes, les roba una sonrisa a los niños, les divierte.
Control postural, concentración y ritmo son habilidades básicas para el aprendizaje de la Lectura y Escritura. A través de ellas el niño puede diferenciar, palabras largas y cortas, separar en sílabas las palabras, reconocer la sílaba tónica , escribir con un ritmo regular dándole un tiempo a cada letra.
Por lo que es muy valiosa la clase de música que estimula estas habilidades, jugando.
¡Felicitaciones para este grupo de niños y su profesor!
El movimiento es parte del comportamiento humano.En la niñez, es fundamental para el aprendizaje, no sólo escolar sino que también, permite la exploración del mundo y la activación de diferentes partes del cuerpo.
El exceso de movimiento se llama hiperactividad y no necesariamente significa que una persona vaya de un lugar a otro. Es un comportamiento de inquietud y dificultad para estar quieto aún estando sentado. Permanece poco tiempo en esa posición, mueve sus manos, juega con objetos que tiene cerca,
Cuando un niño o niña llega aproximadamente a los 7 años, debe haber logrado la potencialidad corporal, es decir: la capacidad del cuerpo para controlarse a sí mismo con alta atención y bajo gasto calórico, lo que inhibe los procesos sensoriales y permite una claridad mental óptima para el aprendizaje. De este modo, podemos entenderla como el autocontrol que ejercemos sobre nuestro cuerpo para podernos concentrarnos y realizar tareas cognitivas.
Muchas personas hacen muchas actividades, son inquietas pero, son eficientes. Realizan sus tareas con precisión y dentro de los tiempos pautados.
El niño o niña hiperactivo no puede comenzar lo que empieza, se cansa con facilidad, busca continuamente nuevos estímulos. Por esta razón, se asocia a fallas de atención y de memoria de trabajo.
Si tu hijo o hija presenta estos síntomas, consultalos con su pediatra.
¿Cómo estimular el autocontrol?
Muchas veces cuando un niño es hiperactivo, buscamos actividades deportivas para que esté ocupado y canalice sus energías.En este sentido, las actividades deportivas siempre son recomendables para el desarrollo corporal.
Pero también, debemos pensar que para contrarestar la hiperactividad el niño o niña debe ser consciente de la quietud, del silencio, de la conexión de su cuerpo y su mente.Por ello, es importante proponer otro tipo de actividades que procuren relajarlo.
Algunas propuestas:
- Respiración profunda: Ayuda a calmar el sistema nervioso y a reducir la ansiedad.
- Juegos de equilibrio: Mantenerse en una portura durante unos segundos. (juego de la estatua).
- Taparle los ojos con un pañuelo y darle consignas para que haga señales con sus manos Ej: tocate la nariz con la mano derecha.
- Jugar a contraer y relajar el cuerpo.
- Acostado/a pedirle que cierre los ojos y que mueva los dedos de sus pies, de sus manos, que infle o desinfle su estómago, que cuente hasta 20 sin abrir los ojos, etc.
- Actividades relacionadas con la naturaleza.
- Cuando se va a dormir, no ponerle pantallas. Bajar la luz y poner música relajante.
- Realizar actividades manuales y artísticas.
- Masajes suaves para relajar los músculos y la mente.
¡Practicalo y contanos cómo te resulta!