¿Por qué escuchar cuentos?

Escuchar cuentos es una excelente oportunidad para establecer vínculos afectivos entre niños/as y adultos. 

Es un excelente recurso para atrapar su atención, mostrarles el valor de la lectura como un medio para acceder a un mundo que deben imaginar.

¿Por qué empezar desde pequeños?

  • Permite que el niño/a se familiarice con su lengua, ritmo y entonación.
  • Desarrolle el hábito de saber escuchar.
  • Incorpore palabras en su léxico.
  • Visualice cómo se usa el libro.
  • Aprenda a voltear las hojas y tratar con cuidado el cuento.
  • Observe texto e imágenes y que comprenda que las letras dicen algo de lo que ve y escucha, «significan».

¿Qué habilidades desarrollan?

  • Atención y concentración.
  • Observación
  • Memoria auditiva
  • Secuencia temporal: diferenciar qué pasó antes y después.
  • Organización gramatical: armado de frases.
  • Imaginación para visualizar lo que escucha.
  • Curiosidad sobre el final, lo que ocurre, puede ocurrir, no ocurrirá.
  • Juicio crítico: le gustó o no la historia

¿Cómo lo hacemos?

  • Los relatos pueden ser orales o con apoyo visual de un cuento.
  • No deben ser muy largos.
  • Debe hacerse en un momento de atención, sin distractores.
  • Hacer una rutina para que el niño/a lo escuche reiteradas veces y desarrolle la memoria.
  • Dejar momentos para que el niño/a complete con palabras o ruidos.
  • Utilizar gestos, onomatopeyas , diferentes entonaciones para que sea más divertido.

 VENTAJAS

  • Cuando el niño/a tiene dos años comienza a apropiarse del lenguaje. Escuchar cuentos le permite interiorizarlo para , paulatinamente incorporarlo y poder expresarse.
  • El relato tiene la ventaja que le ayuda a ir organizando frases, usar conectores y mentalmente, comprender que el mensaje tiene una lógica para ser comprendido.

      NO desaproveches oportunidades para estimular el lenguaje de tu hijo o hija,