Los niños y niñas nos sorprenden cuando aportan ideas y proyectos y encuentran adultos que los acompañan, que disponen tiempo y recursos para cumplir sueños.
¿Qué mejor ejemplo de empatía que mirar las carencias de otros y poder proponerles una actividad enriquecedora?
Sin lugar a dudas , la lectura estimula no sólo la creatividad, el pensamiento sino también el lenguaje y las emociones
¡Felicitaciones Matías!